Bimba, dulce Bimba

Bimba se muere. Igual no será hoy, ni mañana, pero ya es cuestion de tiempo. Al igual que a su amo, el cancer se la lleva de mi lado. Siempre he dicho que, mi perra murió el dia que lo hizo mi padre, que lleva en la tierra tiempo prestado. Y siempre he dado gracias por un dia mas, por otro mas. No solo por ella, entiendeme. Es tambien un lazo con mi padre que sigue ahi, un recuerdo vivo, algo que está. Y se muere. le ha salido un bulto en la pata, y tenemos miedo que le esté destrozando por dentro. Y encima, ocurre cuando mi madre no tiene flores, ni yo trabajo para llevarla al veterinario. Aunque no se si es mejor... si el veterinario la durmiera, posiblemente me detendrian por agresion. No, esa perra morirá en casa, en mis brazos si puede ser. Pero no poder llevarla al veterinario para que se alivie, por el dinero, por el cochino dinero...

Bimba... lleva triste desde tu muerte, papa. lleva escondiendose desde que nos dejastes. Lleva un tiempo en el que hay que obligarla a comer, y ya sabes... al sacarla, te busca ansiosamente, y al no encontrarte, se vuelve, nos tira con una fuerza tremenda a casa.

Mi madre, dice que por las noches, habla contigo, mirando a un vacio que quizás no lo esté tanto, y que te cuenta nuestros problemas. Y que nos cuida, a su manera. Admiro a mi madre.... hasta en estos momentos de debilidad, sin nada, con su propio cancer, preocupandose por mi, se inventa historias para que no todo sea tan triste. O quizás no lo son... ya sabes, los perros, la leyenda dice que viven entre los dos mundos. Si es asi, cuidanos. Y cuidala.

Cuida a Bimba, a mi dulce Bimba.