lunes, noviembre 20, 2006

La Fuerza del Tamarindo


Hace dias, que no escribia... y la verdad, encontraba que me faltaba algo. Creo que he tomado el blog como una valvula de escape, y, lo necesitaba.
Necesitaba un sitio donde reafirmarme, donde dejar de culparme de mil y una cosas, imaginarias o no. De dejar de ser tan debil.
Hace unos dias, me dieron un consejo. Todos los dias, al levantarme, debia pensar en tres cosas. Una, en algo que me gustara de mi mismo. Otra, en algo (algo, no alguien), que me representara, o que me diera la ilusion de representar eso que me gustaba. Y tres, algo que no me gustara.
Creo que es un ejercicio de autoafirmacion, pero, creo que funciona.
Pensé en algo que me gusta... escribir, mis poemas. Me da igual que la gente piense que son malos o no. Representan mi alma, y lo que soy. Un ser autoatormentado, con el complejo de pensar en los complejos, con debilidad autoimpuesta. Es algo que intuia, pero que no me queria dar cuenta. Y como imagen para representar todo esto, como imagen contrastadora, elegí los Tamarindos de la Bahia. Ahora, a la mañana, veo mi blog de notas (el real, no este), y me imagino el blog y un viejo tamarindo. Y luego veo las cosas que debo cambiar, aparte de mis neuras.
El porqué de esto?. Bueno, esos tamarindos se han ganado mi respeto mas profundo. Por sus ansias de vivir, por su lucha contra todo y contra todos.
Os contaré algo sobre ellos.
Hace unos... 130 - 140 años, volvia a casa, a San Sebastian un emigrante. Uno de tantos, que tenian que abandonarlo todo para subsistir. En ese tiempo, nos creiamos Titanes, y eramos hombres de barro. España era un pais analfabeto, inculto, y con industria solo en un par de puntos de la geografia nacional. Poseiamos restos del antiguo imperio, y creiamos ser los dueños del mundo, tal como lo fueron los hispanos de Felipe II. Estabamos en constante guerra civil... a elegir. Absolutistas, monarquicos, cantonalistas, republicanos, carlistas.... y militares "salvadores de la patria", cuando esta no necesitaba ser salvada. Por todo esto, y por mucho mas, no era raro hacer el periplo de "hacer las americas".
Por estas tierras, habia 5 zonas. Argentina, Venezuela, Mexico, Colonias y el Peru.
El venia del Peru. Despues de la victoria del paficico, cuando nuestra pequeña flota, dio una paliza a las flotas conbinadas del Peru, Chile y Bolivia, España habia conseguido que las cosas se calmaran para sus subditos. Eso, y la particular guerra del paficico que tuvieron esos tres paises unos años despues entre ellos, abrió el camino a la emigración vasca.
No me consta el nombre del emigrante... el articulo estaba sesgado en el diario de la epoca, "La Voz de Guipuzcoa". Cosas de guardar en microfilm tintado. Pero si, que, trabajando como un burro, habia logrado un pequeño capital. Luego, se casó con lo que aquí se conoce como "Criollas"; (aqui desde siempre las mujeres peruanas tenian fama de hermosas) plantó raices, y se volvió mas rico todavia.
Pero... le faltaba algo. Y decidió, un dia, dejarlo todo, en manos de su familia, y volver a ver "su" ciudad.
Le gustó lo que vio. San Sebastian, habia pasado de ser un pueblo de pescadores con guarnicion militar, a ser "la capital de verano" de España, como se decia con ironia en Madrid.
Edificios clasicos, grandes Duques, un Casino, peatonalizacion de zonas hasta entonces arenosas o pantanosas, edificios construidos o proyectados por Eifell...
Pero... tambien le faltaba algo. Cuando pasas tantos años viviendo en una zona, la llegas a considerar tuya, aunque no hayas nacido en ella. Y el, añoraba el Peru. Añoraba a sus mujeres, añoraba Lima. Y, decidió, que parte de "su america", se viniera a San Sebastian. No se sabe como, pero, logró convencer al alcalde en su proyecto.
Con sumo cuidado, compró arboles de Tamarindo en el Perú, muchos arboles, y se los regaló a la ciudad. Dice mucho de la fuerza de estos arboles, que lograran sobrevivir al viaje. En aquella epoca, no existia el Canal de Panamá. Asi que, los arboles tuvieron que dar un rodeo por el cabo de Hornos, luego por todo Brasil, y luego saltar el Atlantico. Y finalmente, llegar al puerto de Donosti.
Y, en contra de la opinion de los botanicos de la corte de Madrid, estos arbolitos lograron todavia una hazaña mas. Sobrevivir a la Bahia. Para un arbol, tener agua salada circulando por el aire, es como si nosotros respiraramos metano. Pues sobrevivieron. Para un arbol, los vientos marinos, pueden ser un problema. Los tamarindos, se adaptaron al viento, y crecieron con el. Algo curvados, es cierto, pero vivos.
125 años han pasado. Y los tenaces arboles siguen ahi. Han pasado guerras civiles, bombardeos, fuegos artificiales, 125 años de temporales de un mar arisco y con mal genio.... y ahi estan.
Por eso, tengo el atrevimiento, de desear su fuerza, su determinacion. Su coraje para vivir.
Por eso, me vino a la cabeza hacerlo con ellos.
Porque siguen ahi, y viven.
Espero tener esa fuerza, algun dia. O intentarlo.
Como ves, Viajera... cumplo lo que prometí.
Un saludo de Edem.

8 Comments:

At 11:00 p. m., Blogger Isabel Barceló Chico said...

Una historia muy bella, edem. Y creo que has hecho una elección preciosa al elegir a los tamarindos como el elemento que te resperesenta. Así me gusta verte, con el ánimo más confortado, sabiendo que soportarás vientos y mareas y seguirás en pie. Besos muy fuertes.

 
At 11:46 a. m., Anonymous Anónimo said...

Es un historia hermosa y representativa de un momento de nuestra historia que nos hizo ser mejores de lo que realmente éramos. Ahora es más bien al contrario...

Un abrazo

 
At 1:10 a. m., Blogger Leodegundia said...

Me gustó lo que contaste y como lo contaste. Elegir a un árbol para que te represente es algo hermoso, no importa si es tamarindo o no, los árboles son todos maravillosos.
Un abrazo

 
At 9:20 p. m., Blogger Chus said...

:-)
Preciosa historia.
Besiños

 
At 5:21 p. m., Blogger Eva María said...

hey Edem, me parece genial ;)

 
At 12:17 a. m., Blogger Laura Martillo said...

Enrique!

te extrañaba mucho...Justo esta tarde estuve pensando en ti y en los tamarindos...Quisiera escribirte mas...ni te imaginas donde estoy viviendo...bueno...ya te enviare una carta, ahora solo estoy de pasada
Un abrazo fuerte, fuerte.

L.

 
At 9:15 p. m., Blogger Isabel Barceló Chico said...

Pasé a verte, querido amigo. Besos.

 
At 11:11 a. m., Anonymous Anónimo said...

Es hermoso lo que cuentas; solamente quería hacer un apunte, y es que el árbol en cuestión no es un tamarindo sino un tamariz (Tamarix gallica), pero no te preocupes, es un error muy común, sobre todo entre donostiarras.

Un saludo.

 

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