martes, marzo 18, 2008

Hace tiempo...

Hacia tiempo que no escribia... veo que desde mi cumpleaños en Febrero. Buff, mucho tiempo. Mucho tiempo para un animal de letras como yo. Je... animal de letras. Creo que acabo de encontrar mi descripcion. Quizás, porque me siento como tal. Piensalo... en la vida real, soy un pobre gordo, sin un futuro definido, que no ha encontrado a nadie, que no sabe que será de el en ese futuro. Que tiene ilusion por la vida si, pero que no quiere vivirla solo. Todavia tengo que hacer algunas cosas en la vida. Debo viajar a la tumba de mis antepasados, en Asturias. Debo encontrarla, y por lo menos verla. Debo publicar el trabajo de mi padre. Y hay amigos, gente muy querida, a la que tengo que hablar cara a cara, por lo menos una vez en la vida.

Deberia empezar por adelgazar. Creo que asi, podria encontrar un trabajo, y de paso calmar a mi madre. Mi madre... la he hecho rabiar, y puede que no la haya querido como se merece... pero se que me quiere con toda su alma. Trato de cuidarla, de amarla, pero sin parecer que estoy encima de ella. Y me desilusiono con mis fallos, con mis fracasos. Hay cosas, que me hacen seguir, que me dicen que merece la pena vivir por ellas. Y por eso sigo.

Quiero volver a escribir como antes... desde mi padre, poco he escrito, y muy poco bueno. Y necesito además hacerlo. Es algo que me llama. Me gustaria.... me gustaria poder volver a escribir poemas, tener alguien a quien dedicarselos. Realmente... la tengo, pero no quiero molestarla mas de lo que lo hago. Siempre me pregunto, que pasaria si pudiera conocerla en persona. Que me pasaria si pudiera. Pero me niego a seguir con utopias. No niego que seria algo precioso, pero posiblemente no pasará, asi que.... Alguien digno, bueno, y al que podria amar si pudiera. Pero no puedo hacerlo. El tiempo y el espacio no me lo permiten. Asi que... me alegra poder llamarla amiga. La mejor que he tenido en mucho tiempo. Alguien a la que querer siempre. Alguien a la que no quiero perder nunca.

Como ves, pocas razones, para seguir, pero inmensas. Y a todas ellas doy gracias. A mis amigos, a ella, a mi madre, a todo eso que me hace vivir... gracias.

Vale.